Para poder embalsamar es necesario que los embalsamadores se cubran totalmente el cuerpo, también deben usar un respirador mientras dura todo el proceso. Es necesario hacer esto por la toxicidad alta que tiene el formaldehído.
Por otra parte, todos los fluidos y sangre extraída del cuerpo son eliminados por el sistema de alcantarillado o fosa séptica. Hay que aclarar que la sangre se mezcla con productos químicos que la desinfectan, lo que no representa una amenaza para la salud pública; sin embargo, su efecto es al medio ambiente.
Por poner un ejemplo, solo en Estados Unidos se usan cada año aproximadamente 5 millones de galones de líquidos para embalsamar; este líquido se conforma por una parte de formaldehído y otra de etanol.
Formaldehído y su peligrosidad.
Este material tiene un alto índice cancerígeno, de hecho, Estados Unidos lo tiene fichado como uno de los más peligrosos y dañinos.
Con el paso del tiempo el cuerpo que ha sido embalsamado se descompondrá, y cuando esto pasa, es posible que el líquido se filtre en el suelo, afectando así al medio ambiente inmediato del suelo y el agua.
Pero si el cuerpo es cremado, el formaldehido va hacia la atmósfera y se queda ahí aproximadamente 250 días. Esto es importante, pues es un agente cancerígeno capaz de alcanzar a seres humanos y animales; además es soluble en el agua, y si se va a la atmósfera se mezcla con la condensación, también con la lluvias, para terminar cayendo en plantas, animales, fuentes de agua y seres humanos.
El embalsamiento no es un requisito de la ley, sin embargo si el cuerpo va a ser puesto para ser visto la funeraria puede solicitar el embalsamiento. Asimismo, si el cuerpo necesita ser trasladado largas distancias si se puede ordenar embalsamar el cuerpo.
En realidad el cadáver no representa peligro alguno a la salud pública, por otra parte, el embalsamiento si puede dañar la salud pública, específicamente a las personas que trabajan embalsamando cuerpos. Ya que corren un riego alto de contraer cáncer.
De hecho, se han realizado investigaciones en Estados Unidos en donde se ha demostrado que las personas expuestas a este químico tiene mayor posibilidad de contraer cáncer de linfoma, leucemia y cáncer cerebral.
Existen técnicas alternativas para embalsamar.
El embalsamiento es necesario para mantener el cuerpo freso y seco, y que la descomposición tarde en llegar, se usa para preservar el cuerpo. Por lo que puede usarse algunas alternativas que no incluyan el formaldehílo, estas técnicas pueden ser: hielo seco, paquetes de gel, paquetes de congeladores o refrigeración.
Pero para poder optar por estas técnicas se deberá preguntar a la funeraria si cuenta con instalaciones de refrigeración para conservar el cuerpo. Pues precisamente la refrigeración, es el método más sencillo y económico cuando se quiere conservar el cuerpo.
Por otra parte, también se puede optar ya por el entierro inmediato, ya por la cremación directa; además de ser más económicos, no requieren embalsamiento, y las funerarias deberán tener esa opción.