Todos pasamos o habremos de pasar por la pérdida de un ser querido. Cuando esto sucede nos ponemos tristes, nos duele, nos deprimimos. Y si nuestro familiar o amigo está enterrado, seguro vamos y le visitamos a la tumba.
Pero lo cierto es que pensamos que este dolor y pena solo pasa en humanos, nos olvidamos que las mascotas son seres vivos y también pasan por una pérdida a la muerte de sus dueño. Para ellos también es difícil adaptarse al cambio y a la pérdida, sobre todo si entre él y su dueño se formó un vínculo estrecho.
Tanto perros como gatos, son capaces de generar vínculos fuertes y profundos con su dueño, por lo que no es de extrañar que a su muerte el animal lo eche de menos, y lo busque, ya sea en su cuarto o hasta en su tumba.
Por eso, en este artículo te dejo una lista de mascotas fieles que han llorado la muerte de sus amados dueños.
- Danny.
Un pastor alemán que fue compañero de Mountie Dave Ross, un oficial de la GRC en Canadá. Cuando murió el hombre asesinado a tiros, el pero lloró su pérdida, y en el servicio fúnebre estuvo junto al ataúd de su dueño. Se le podía ver triste y ansioso. Testigos afirman haber escuchado como se quejaba y lloraba mientras el servicio fúnebre duro.
2. Hachikō.
Un akita, este perro quien se a convertido en un icono nacional el Japón. Esperaba a su dueño en la estación de tren local cuando este salía del trabajo. Pero un día el dueño de Hachikō murió y no se pudo encontrar con su perro. Esto no detuvo al canino quien regresaba cada día a esperar al hombre, lo hizo durante 9 años, hasta que en 1935 murió.
3. Capitán.
Un perro pastor alemán, quien pronto se encariñó con su dueño Miguel Guzmán. Quien originalmente había traído al perro como regalo para su hijo; sin embargo la amistad surgió entre el hombre y Capitán. Justo al año Miguel murió, y capitán desapareció junto con él. Para sorpresa de todos, lo encontraron en el cementerio donde Miguel había sido enterrado, el perro estaba llorando. No quiso regresar más a casa.
4. Hawkeye.
Un perro perdiguero de Labrador, quien perdió a su dueño en 2011, Jon Tumilson de la marina. El perro estuvo en el servicio fúnebre, llamando la atención entre todos los asistentes, pues cayó al suelo junto al ataúd con un suspiro de tristeza. Permaneció al lado del ataúd el resto del servicio.
5. Spot.
Una perra cuyo dueño, Wayne, fue asesinado por un conductor que iba borracho. Ella permanece de guardia espirando a su dueño, y el hijo de Giroux va y la visita, pero sabe bien que a quien espera ver es a su padre.
6. El gato del cementerio.
Un gato fue encontrado sobre la tumba donde yace su antiguo dueño Ibu Kundari, se niega a irse, lleva más de un año en el mismo lugar. La mujer que descubrió al gato, pensó al principio que se trataba de un gato sin hogar. Pero, tras seguirlo, descubrió que el gato regresaba a donde fue la casa de Kundari, en donde los hijos de la señora le dan de comer, y luego de un rato regresa a la tumba de su amaba dueña.
No cabe duda lo cercanos que pueden llegar a ser los animales y sus dueños.