La pérdida de un ser querido deja secuelas dolorosas y conlleva un proceso poderlas superar. La persona que experimenta la muerte de su familiar o amigo, tendrá que pasar por un duelo necesario para poder seguir adelante y superar la pérdida. El proceso normal de duelo puede considerarse como una forma leve de lesión por estrés traumático, es decir, la muerte del ser querido.
El duelo complicado y su presencia permanente.
Se puede detectar el duelo complicado cuando han pasado uno o más años, y la persona que experimenta el duelo no ha mejorado. Estas personas son incapaces de manejar su dolor, es por eso que el proceso de duelo se retrasa, o se estanca, y es ahí cuando la persona necesita ayuda profesional.
Puede considerarse duelo complicado cuando han pasado entre 18 a 24 meses después de una pérdida, y la persona aún sigue en el proceso, ‘’luchando’’ por estar mejor. Sin embargo, si existe un proceso de duelo intenso, muy, muy intenso, pero corto, también podría considerarse duelo complicado.
Cuándo se presenta el duelo complicado.
El duelo complicado aparece cuando algo interfiere con el proceso natural de la curación, es decir, en el aprendizaje. Esto ocasiona que la persona se sienta atrapada en el dolor intenso de la pérdida, está bloqueada y no puede aceptar la muerte, ni adaptarse a ella.
Esto llega a incapacitar a la persona, no puede desenvolverse o vivir de manera natural y normal para ella. Todos experimentamos dolor cuando perdemos a alguien, pero las personas con duelo complicado extienden el dolor a niveles intensísimos.
En otras palabras, el duelo complicado está en la cima del espectro de dolor, en lo referente a la intensidad del mismo, como en su duración.
Características de las personas que padecen duelo complicado.
Las personas que padecen un duelo complicado están atrapadas en la evasión, y por más que quieran no pueden adaptarse a la nueva situación. Dan vueltas y vueltas a pensamientos casi obsesivos, como: ‘’si lo hubiera llevado al doctor antes’’, ‘’ si hubiera puesto atención a ese dolor que sentía hace meses’’, y pensamientos por la misma línea.
Sienten una desesperación por sentirse cerca de la persona que han perdido, por lo que generalmente suelen pasar horas viendo fotos o vídeos, buscando algo que los acerque, como el olor de su ropa, tocar sus cosas, o pasar largo rato pensando en todos aquellos momentos que pasaron juntos. Esto supone un descanso, la persona con duelo complicado, se siente bien en esos momentos de remembranza, pero una vez que eso termina y vuelve a la realidad, en la cual su ser querido ya no está, regresa el dolor.
Por último, es importante que si tú o alguien cercano está pasando por un duelo complicado, se acerque a un profesional. Si ha pasado mucho tiempo, y sigue doliendo se tiene que afrontar la pérdida. No dudes en buscar ayuda, si así es necesario.
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